Incendios, enfrentamientos con carabineros y once fallecidos son el resultado de las masivas protestas en Chile, contra del alza de las tarifas del transporte público, una medida que Piñera suspendió tras la escalada de las manifestaciones.
La Intendencia de la Región Metropolitana de Santiago de Chile informó este lunes que se registran 11 fallecidos en aquel distrito durante las manifestaciones en contra del presidente Sebastián Piñera. Asimismo, la Fiscalía anunció el domingo que había un total de 1.554 personas privadas de su libertad, que se encuentran en «audiencia de control de detención».
Por otro lado, el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) de esa nación sudamericana en las últimas horas presentó 11 acciones legales por «violencia policial». En concreto, se trata de ocho querellas contra carabineros y militares junto a tres recursos de amparo para resguardar la «seguridad de personas». Además, instaron a la ciudadanía a que denuncie las irregularidades.
En ese sentido, el INDH ya había alertado sobre «22 personas lesionadas, denuncias de desnudamientos, torturas y malos tratos» por parte de los uniformados. Al respecto, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) tomó nota de ello y expresó su preocupación.
Las manifestaciones se habían desatado luego de que se haya anunciado un considerable aumento en el metro de Santiago, cuya aprobación fue emitida por el Ministerio de Transporte. De esta forma, el precio del pasaje pasaba a valer el equivalente a 1,2 dólares, y muchos ciudadanos reaccionaron. Así, varios pasajeros ingresaron al metro sin pagar durante días, e incentivaron al resto a hacer lo propio desde las redes sociales, bajo el hashtag: «#EvasiónTodoElDía».
Tras cinco días de protestas y tensión en las estaciones del metro y la ciudad en general, los disturbios fueron en aumento y el sábado por la madrugada Piñera declaró el estado de emergencia, mientras continuaban los enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los protestantes. Así, bajo el mando de la Defensa Nacional en la zona metropolitana, se estableció el toque de queda desde las 22 hasta las 7 de la mañana.
Además, el 19 de octubre el Gobierno determinó dar marcha atrás con el aumento del transporte público, pero las protestas continúan y expresan el descontento generalizado con la actual Administración.
Con este marco, este lunes, las autoridades de la región Metropolitana confirmaron un saldo de 11 muertos registrados durante los disturbios en varios puntos del país. Añadieron que más de 1.500 personas se encuentran detenidas en relación con los hechos.
El presidente Piñera, por su parte, hizo el domingo un llamado a «empezar a ganar esta batalla» contra los actos vandálicos y la delincuencia. «Estamos en guerra contra un enemigo poderoso, implacable, que no respeta nada ni a nadie», aseveró el mandatario, informando que Iturriaga ha dispuesto 9.500 militares para resguardar la paz y controlar los desmanes.
Javier Iturriaga, jefe de la Defensa Nacional de Chile y encargado del estado de emergencia en la región Metropolitana, ha contradicho las palabras del presidente Sebastián Piñera en las que el mandatario declaró que la nación estaba «en guerra» durante los presentes actos masivos de protesta.
«La verdad es que no estoy en guerra con nadie», aseveró Iturriaga mientras proveía a la prensa un balance de la segunda jornada tras el toque de queda decretado en varias provincias.
Iturriaga describió la ciudad de Santiago como «en calma, en paz», y a los oficiales de las Fuerzas Armadas como «tranquilos»