El ministro de Energía, Javier Iguacel, admitió que “aún quedan ajustes por hacer” en ambos servicios, y puntualizó que “están llegando las facturas de gas, que son duras”. Anticipó que se exportará cada vez menos
En declaraciones televisivas, Iguacel admitió que “aún quedan ajustes por hacer” en ambos servicios, y puntualizó: “ahora están llegando las facturas de gas, que son duras”.
El ministro explicó que “tanto en el gas como en la electricidad, las facturas tienen tres componentes: el costo de la energía, el transporte y la distribución”.
“Transporte distribución son contratos que se renegociaron en pesos, y se ajustan en pesos, por inflación”, puntualizó, por lo cual rechazó que el Gobierno haya “dolarizado” el costo de la energía.
Según indicó, “este Gobierno no es que haya dolarizado a la energía. En realidad, la hiperdolarizó el kirchnerismo, que nos hizo ser dependientes de la energía externa y llegamos a gastar 6 mil millones de dólares por año para importar”.
Iguacel expresó además que “en el caso del gas, gracias a la inversión que se está haciendo, tenemos la oportunidad de salir de la necesidad de importar. Solo en invierno vamos a tener que importar, y cada vez menos”.
“Esperamos entonces que el precio baje considerablemente. Y al bajar el precio de producción, esperamos una factura previsible que este verano y apuntamos a que en el invierno que viene, sea en pesos similar a la de este año”, enfatizó.
Por ese motivo, aseguró: “después de dos años y medio de Gobierno, este año nos va a empezar a sobrar gas y vamos a poder exportar a Chile. Estuve en ese país hace pocos días y hablamos de esto”. (APFDigital)