“En venta”. El cartel ubicado en el predio encendió el alerta de la comunidad judía, luego que el director del Museo de Villa Domínguez, Osvaldo Quiroga, publicara la noticia en el muro de Facebook de la institución.
La sinagoga de Colonia Sonnenfeld (San Gregorio) –la primera levantada en territorio entrerriano- está enclavada en un predio que antiguamente pertenecía a la Cooperativa Fondo Comunal, y pasó a manos de un particular hace alrededor de cinco años, cuando se remataron los bienes de esa institución. Ahora, al parecer, el dueño quiere vender la propiedad, y obviamente, la operación incluye a la sinagoga. El riesgo es que el nuevo dueño –si lo hubiere- pretenda derribarla.
No obstante, existiría un obstáculo: la sinagoga fue declarada “Patrimonio Histórico Arquitectónico de la provincia”, merced a un decreto del poder ejecutivo del año 2010. Ello implica que, aún cuando el edificio pertenezca a un particular, éste deberá “tomar los recaudos necesarios para su conservación y preservación”.
No es su única obligación: la norma establece que debe “consultar al área de Preservación del Patrimonio Cultural y Ambiental de la subsecretaría de Cultura de la provincia todo cambio, modificación, intervención que sobre el bien se pretenda ejecutar, e informar la aparición de posibles deterioros, riesgos o situaciones que pudieran alterar, degradar o comprometer las características del bien”.
El templo de San Gregorio se construyó en 1893 y es uno de los testimonios más antiguos de la colonización judía en el centro entrerriano. “Durante décadas fue el lugar de culto de las 50 familias colonizadas allí (…) y contaba con un anexo emplazado en el mismo terreno, que fue el salón, escuela idish y biblioteca al que asistían también criollos de la zona cuyos hijos recibían instrucción primaria en las escuelas de la Jewish”, describe el decreto, que lleva las firmas del gobernador Sergio Urribarri y del ministro de Gobierno Adán Bahl.
lamentablemente,cuando la comunidad no se hace cargo de estos bellos testimonios suele pasar esto,esta abandonado igual que cuando vas al cementerio centenar de tumbas rotas sin cuidado abandonadas ,profanadas y todo porque porque a los jerarcas comunitarios les gusta aparentar en vez de preservar,no hay quien pague?,a lo mejor ya ni existen descendientes, y despues nos quejamos porque alguien quiere comprar o se cierran establecimientos, es una verguenza