Lo habían trasladado a nuestra ciudad por “acercamiento familiar”, pero nadie iba a verlo

Se ahorcó en la jefatura de Villaguay el preso que había tomado de rehén a un celador en Uruguay

El joven Antonio Gómez Urbine, un preso que el pasado miércoles había tomado de rehén a un guardiacárcel de la Unidad Penal 4 de Concepción del Uruguay, fue encontrado muerto, ahorcado con una sábana, en el calabozo que ocupaba desde el jueves en la jefatura departamental Villaguay, adonde lo habían trasladado para que tuviera un acercamiento familiar, con su supuesta novia de nuestra ciudad.

El cuerpo del muchacho, que tenía 27 años, apareció colgado de una ventana de la celda donde se encontraba, una destinada normalmente a mujeres, con una sábana anudada alrededor de su cuello, alrededor de las 18:30 de ayer.

Pocas horas antes, y en voz baja, desde la jefatura no habían ocultado su disgusto por el  permiso que le había otorgado al reo el juez de ejecución de sentencia, Carlos Rossi, para que pase cinco días en Villaguay, donde tenía, en teoría, sus únicos vínculos familiares.

“Acá no es la primera vez que lo mandan, y nunca viene nadie a visitarlo. Es un problema, porque no hay infraestructura para tener a una persona violenta y enferma”, había dicho fuentes policiales el jueves, luego de la llegada del reo.

Y en un tono profético, habían advertido: “En cualquier momento nos arma un quilombo acá”.

Gómez Urbine no protagonizó incidentes en Villaguay, pero sí aprovechó para ponerle fin a su vida.

El joven, oriundo de Misiones, padecía sida y tuberculosis y estaba purgando una condena a perpetua por dos homicidios.

Tras conocerse el hecho, la jefatura pidió la intervención de la división Criminalística,  que trabajó hasta casi las diez de la noche efectuando las pericias de rigor. Tras ello, los bomberos voluntarios trasladaron el cuerpo hasta la morgue local (foto).

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